La semana pasada se celebró en Guatemala el X Congreso Marítimo Portuario, un encuentro local de dos días en el que asistieron representantes del sector de Centroamérica, Cuba y Holanda. En este encuentro, el Gran Canal de Nicaragua fue considerado por expertos como una importante oportunidad para el crecimiento de la actividad marítima y portuaria, del transporte y de las empresas.
“Esto es sumamente importante y demuestra que esta obra está siendo con rigor social”, comentó Telémaco Talavera, portavoz de la estatal Comisión del Gran Canal de Nicaragua, sobre la acogida del proyecto. Y es que de acuerdo al representante, el Canal le permitiría al país crecer “hasta un 8, 10 o 12%”, lo cual además promoverá el desarrollo de su país y la región.
“Nos va a permitir dar un gran salto en la reducción de la pobreza, la extrema pobreza y el hambre con la generación de más y mejores empleos”, destacó en el margo del Congreso.
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La huella del Canal
El trazado de la ruta provocó malestar en 2014 debido a los desplazamientos que implicaría su construcción y al posible daño ambiental que genere. Ante los cuestionamientos de ONG’s y del sector ambientalista, la concecionaria HKND Group contrató a la consultora internacional de geología y recursos CSA Global, para que realizara un estudio aéreo geológico de la ruta de la vía y la línea costera del Gran Lago.
Al ser consultado al respecto, el portavoz de la comisión sostuvo que los expertos están finalizando el análisis del Estrudio de Impacto Ambiental y Social (EIAS) del proyecto.
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Capacidad cuestionada
El Canal contará con 276 kilómetros de largo, por 230 a 520 metros de ancho, y 30 metros de profundidad, lo cual triplica la longitud del Canal de Panamá y la convierte en la obra de ingeniería más grande construida por la humanidad.
No obstante, ante los ojos de Jorge Quijano, administrador de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), dicha magnitud hace que el proyecto sea cuestionable. Según indicó, para abrir la vía Nicaragua tendría que dragar 10 veces más sedimentos de los que ha extraído Panamá en 133 años. Esto equivale a 5,500 millones de metros cúbicos de material sólido, versus los 549 millones que ha implicado la obra panameña.
Además detalló que para lograr extraer tal cantidad en 5 años, como prometió HKND Group, esta deberá tener un ritmo de dragado diario 22 veces mayor al que ha tenido Panamá en el último quinquenio. Es decir, que si su país ha excavado 140,000 metros cúbicos diarios en cinco años, Nicaragua deberá llegar a los 3,1 millones para conseguir su meta.
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Dentro de las objeciones de Quijano también destaca el presupuesto del proyecto nicaragüense. Según ha estimado la concecionaria, la obra interocéanica costaría US$50.000 millones, pero el administrador de la ACP considera que esta cifra sería de al menos US$70.000 millones, lo que obligaría a Nicaragua cobrar el dobre del peaje que cobre Panamá para obtener un retorno de la inversión.
“Si es una inversión, como se ha dicho, tendrían que competir con nuestros peajes”, indicó la autoridad panameña.