Cuatro meses después de haber sido declarado colaborador eficaz, por parte del Ministerio Público -MP- y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), Salvador Estuardo González, Eco, rindió declaración en anticipo de prueba en relación a la red de defraudación aduanera, denominada “La Línea”.
Aunque la audiencia tomó más tiempo del estimado, debido a las múltiples tácticas dilatorias y recursos legales planteados por la defensa de los acusados para tratar de suspender la audiencia, González expuso ante el Juez Miguel Ángel Gálvez, cómo llegó a convertirse en el administrador de la red y detalló el funcionamiento de cada uno de los movimientos.
Bienes de Otto Pérez están en la mira de la justicia guatemalteca
González confirmó la participación de cada uno de los involucrados, incluyendo al expresidente Otto Pérez Molina, la exvicepresidenta Roxana Baldetti, el exjefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Carlos Muñoz, el exsecretario privado de la Vicepresidencia, Juan Carlos Monzón, y la exintendente de Aduanas, Claudia Méndez.
Información clave
En sus declaraciones el colaborador afirmó que a cambio de un salario de US$10 mil aceptó, inicialmente, administrar el patrimonio de Baldetti, a quien conoció en el año 2013 a través de Monzón. Posteriormente fue contactado por Molina para hacerse cargo de un proyecto de recaudación, convirtiéndose en el filtro del enlace que, el entonces presidente, necesitaba.
Fue así como llegó a administrar la recaudación tributaria y el cobro conocido como “cuota de agilización” o “cola” que permitía que determinados importadores pudieran agilizar la extracción de su mercadería de aduanas.
Esa tributación ilícita (defraudación aduanera) era repartida entre los integrantes de la red, incluyendo Baldetti y Molina, a quienes se entregaba la mayor parte. Eco, también, hizo evidente la forma en que se realizaron distintos movimientos aduaneros con el fin de colocar y eliminar a personas clave dentro de la estructura.
Fraude tributario es solo la punta del iceberg de la corrupción en Guatemala
De esta forma, Eco pone nuevamente al descubierto la red de corrupción, liderada por altos ex funcionarios guatemaltecos, que logró defraudar al fisco por alrededor de 260 mil dólares a la semana.
Un convenio de colaboración
Salvador González, ha sido resguardado bajo fuertes medidas de seguridad desde su captura, sobre todo después de haber sido amenazado y aceptar el convenio de colaboración eficaz, por medio del cual se comprometió a retornar parte del dinero obtenido de forma ilícita de la estructura.
Con esto, Eco además puede llegar a reducir su condena a aproximadamente siete años de cárcel.
Foto: Ministerio de Gobernación