(M&T)-. Un grupo de 20 familias que se dedican a la producción agrícola, decidió buscar una alternativa que les permitiera seguir vendiendo sus productos certificados como 100% orgánicos. Fue así como nació el emprendimiento El Buen Mercado.
Este modelo de negocio se consolidó como una plataforma web en la que los usuarios pueden seleccionar los productos que necesitan en categorías como bebidas, frutas, granos, harinas, huevos, vegetales, procesados y hongos. El servicio de atención es de lunes a jueves, los viernes se cosechan los alimentos que fueron vendidos para ser entregados los sábados.
Le invitamos a leer Autoridades de República Dominicana buscan fortalecer proyectos de seguridad alimentaria con el Programa Mundial de Alimentos
Esta es la oferta de valor que ofrece este novedoso servicio, ya que el cliente tiene la garantía de la frescura y altísima calidad de los productos que adquirió, además, se contribuye al desarrollo de las zonas de las que provienen los artículos, entre las que destacan Cartago, Moravia, San Ramón de Alajuela, Escazú y Santa María de Dota.
“Nuestra filosofía y razón de emprendimiento se basa en ofrecerle a los clientes una excelente experiencia. Para ello, se desarrolló una plataforma tecnológica amigable con el usuario, una logística de entrega y cosecha altamente eficiente, además de la altísima calidad de los productos orgánicos que recibirá en la puerta de su casa o negocio. En este último somos especialmente cuidadosos, porque trabajamos en proteger la tierra”, explicó Alfredo Román, encargado de comunicación y mercadeo de El Buen Mercado.
Su modelo de trabajo agrícola los lleva continuamente a someterse a rigurosos análisis y estudios, que le permitan obtener las certificaciones de 100% orgánicos a su producción. Su sistema de producción es inteligente, ya que conocen muy bien y aprovechan los ritmos de la naturaleza, las relaciones entre cultivos y los nutrientes del suelo, por lo que resulta ser muy cuidadosa con la vida del suelo y con la calidad y conservación del agua.
“Nuestras fincas buscan ser ecosistemas que incorporan árboles, plantas diversas, insectos y microorganismos benéficos, aprovechamos los sobrantes, cuidamos el agua y rescatamos nuestras semillas tradicionales. El resultado es la producción constante y tecnificada de más de 120 productos de alta calidad, con un excelente sabor y con un alto nivel nutricional”, explicó Antonio Chávez, gerente general de la empresa.
