El dominio del idioma inglés es una debilidad entre un importante en medio de una negociación, una habilidad que se vuelve cada vez más relevante en las empresas, en un contexto donde el libre comercio con los Estados Unidos estrecha el intercambio con Centroamérica y República Dominicana.
“Hay una cantidad significativa de ejecutivos que hablan inglés, pero no saben negociar, no pueden comunicarse oralmente de manera firme y precisa. Tienen un nivel básico del idioma, pueden entender, pueden escribir, pero al momento de hablar, no logran comunicar sus ideas”, Vladimir Umaña, director académico de la Academia de Lenguas.
Con fines de tener capacidad para negociar, Umaña entiende que los ejecutivos tienen el imperativo de conocer a fondo la terminología en inglés que se relaciona con su área, tener la fluidez para responder a argumentos complicados, así como dominar lo que se plantea en la mesa de negociaciones, tanto los conceptos literales, como los conceptos del idioma (aquellos que son propios de una relación entre el idioma y la cultura de esos hablantes).
La comprensión auditiva, la habilidad de lectura, la escritura y la conversación deben ser entrenadas de manera constante por aquel ejecutivo que vive en República Dominicana o cualquier país que no es angloparlante, pero desea conservar un manejo satisfactorio del idioma.