Los gobiernos de América Latina y El Caribe invierten en promedio sólo el 0.4% del PIB en sus hijos más pequeños, en comparación con países de alto desempeño que invierten cuatro veces más, reveló el informe “Los Primeros Años: El bienestar infantil y el papel de las políticas públicas”, publicado por el BID y presentado el pasado 3 de mayo en Ciudad de Panamá.
El estudio destacó que los niños y niñas de la región siguen presentando serias dificultades en el lenguaje y capacidades cognoscitivas, por falta de atención integral temprana durante los primeros cinco años de vida.
Un nivel básico de educación haría más ricos a los países
El especialista y coautor del informe, Norbert Shady, expresó que “la mayoría de los países han inyectado más dinero en educación para niños de entre 6 y 11 años que en los programas de cuidado infantil y crianza de los infantes entre 0 y 5 años. Esta asignación resulta desafortunada, ya que invertir más en el cuidado y crianza de los hijos genera mayor retorno a la inversión”.
El BID reconoció que si bien el acceso a la educación preescolar es prácticamente universal, aún queda mucho por hacer en la calidad. “Por motivos de equidad como de productividad a largo plazo, la inversión y gestión de políticas públicas para la primera infancia es un asunto que Panamá no se puede dar el lujo de ignorar”, dijo el representante del BID en el país, Fidel Jaramillo.