Alejandro Marín
Con la nueva ley, las tarifas del Impuesto de Valor Agregado (IVA) serán del 14% el primer año y del 15% en el segundo. Actualmente, el impuesto general de las ventas solo grava las ventas y unos pocos servicios; con la implementación del IVA se gravarán tanto las ventas de bienes como la prestación de servicios.
Asimismo, el impuesto sobre la transferencia de vehículos, aeronaves y embarcaciones subirá al 5% y el traspaso de bienes inmuebles será del 3%.
Según el Gobierno Central de Costa Rica, el límite natural de deuda pública (LND) es el 47,6% del PIB. El LND es el nivel máximo que debe alcanzar el endeudamiento con respecto al PIB sin volver desfavorables las condiciones para cubrir las obligaciones financieras del país con ajustes fiscales realistas.
Sin estos ajustes, el Ministerio de Hacienda calcula que el nivel de endeudamiento en 2015 es de 47,1% del PIB, y que para 2016, subirá al 52,2%, una cifra mayor incluso que la recomendación del Fondo Monetario Internacional para la economía costarricense (la mitad del PIB).
Por esta razón, para el Ministerio de Hacienda y para la Academia de Centroamérica es necesario poner en marcha un conjunto de medidas correctivas de ingresos y gastos en materia de recaudación fiscal cuanto antes. Las medidas y controles por los que Hacienda apuesta, tienen el objetivo de recaudar más recursos, que aparte de contribuir a la disminución de la deuda pública podrían destinarse a programas sociales en diferentes áreas.
Posiciones en contra
Para Edna Camacho, economista de la Academia de Centroamérica, que las empresas y pobladores en general paguen más impuestos puede suponer una reducción en ciertos privilegios, y, sin duda, esto implicará un sacrificio en el corto plazo para obtener beneficios en el mediano.
Por otro lado, el presidente de la Cámara Costarricense de la Construcción, Guillermo Carazo, el proyecto incrementará los costos del lastimado sector de la construcción en un 12%, lo que posiblemente genere una contracción en este sector que ya ha tenido una caída de 6.000 empleos en el último semestre.
La reforma de Hacienda también contempla la creación del primer impuesto ambiental del país a los recipientes de plástico. No obstante, este impuesto no es bien vista por la Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria, donde se cree que el encarecimiento de estos productos no detendrá las repercusiones ambientales.
En un comunicado de prensa, el organismo manifestó que la recolección y el reciclaje son programas que ya se están implementando para disminuir la contaminación, y que esta contaminación de ningún modo decrecerá con el aumento de los gastos de las empresas y las familias costarricenses que consumen muchísimos productos envasados con plástico.