El emprendedor Derek Sivers expone claramente sus puntos con palabras fáciles de recordar e imágenes realistas. Su mensaje, de que el hecho de compartir su intención de alcanzar una meta reduce las probabilidades de éxito contradice a muchos libros de autoayuda y sus ideas claras pueden replantear el enfoque sobre cómo alcanzar metas.
Varios estudios muestran que la euforia que disfruta al anunciar sus objetivos puede hacer que tenga menos probabilidades de lograrlos. Ya que cuando usted le dice a las personas lo que desea conseguir y ellos se dan por enterados, se crea una realidad social donde le hace creer a su mente que ya alcanzó su meta, mientras usted se regodea en esa agradable sensación y pierde la motivación para trabajar en la consecución de su meta.
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Esta teoría contradice la creencia de que uno debería informar a los amigos sobre sus metas, para que estos lo alienten y presionen a alcanzarlas. Sin embargo, un siglo de investigaciones refuta ese enfoque. En 1926, el psicólogo social Kurt Lewin denominó “sustitución” a esta práctica de revelar planes en lugar de llevarlos a cabo. En 1933, Vera Mahler demostró que cuando otras personas se dan por enteradas de sus objetivos, la mente lo percibe como algo real.
En el 2009, Peter Gollwitzer realizó un nuevo estudio, donde le pidió a 163 personas que escribieran sus metas. La mitad de los participantes compartió sus metas con el grupo, mientras que la otra mitad no las reveló. Todos tuvieron 45 minutos para llevar a cabo el trabajo que contribuiría a la realización de sus metas, pero se les dijo que podían parar de trabajar en cualquier momento.
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Quienes no revelaron sus objetivos trabajaron los 45 minutos y después dijeron que sentían que aún les faltaba mucho por hacer para lograrlos. Por el contrario, quienes habían compartido sus metas trabajaron, en promedio, unos 33 minutos e informaron que se sentían mucho más cerca de alcanzarlas.
Por ende, para aumentar sus probabilidades de éxito, mantenga sus ambiciones en secreto, y posponga la emoción de compartir sus metas hasta que las haya alcanzado. Si tiene la necesidad de hablar sobre sus ambiciones, hágalo de una manera que no contemple una falsa satisfacción, haga hincapié en el trabajo duro y la capacitación que se requieren para llegar a su destino.