Redacción/EFE
“Seguiré defendiendo nuestra petición de US$1.000 millones al Congreso”, dijo Barack Obama durante su visita a Jamaica este jueves, en referencia al Plan de Prosperidad con el triángulo norte de Centroamérica. Para el mandatario, urge resolver una reforma migratoria en Estados Unidos, con el fin de regularizar a los miles de indocumentados centroamericanos que llegan a su país.
De acuerdo a Obama, los fondos se destinarían para asociarse con los países de la región “mientras tratan de resolver los factores subyacentes que han llevado a muchos en el pasado a realizar el viaje peligroso hacia el norte”, indicó. De esta forma, se busca atacar la violencia y la pobreza en la región, considerados por el mandatario como dos detonantes del flujo migratorio.
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Obama manifestó su deseo de reencontrarse con los líderes de América Central en la Cumbre de las Américas, a celebrarse esta semana en Panamá, para profundizar en los temas migratorios pendientes. En esta línea también declaró que el sistema de inmigración estadounidense “no funciona” y resaltó la necesidad de acelerar las medidas ejecutivas que actualmente están blqueadas en los tribunales.
En noviembre pasado, el mandatario anunció una serie de decretos en materia migratoria para proteger de la deportación a miles de estudiantes indocumentados y a inmigrantes que son padres de ciudadanos o residentes legales en su país, sin embargo éstas fueron bloqueadas temporalmente por el Congreso.
“Millones de personas siguen viviendo en la sombra. Por eso mantengo mi compromiso por trabajar con el Congreso para aprobar una reforma migratoria integral”, insistió.
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