Aunque la calidad de vida está mejorando alrededor del mundo, de acuerdo con una nueva investigación del Índice de Progreso Social 2017, publicada por el Social Progress Imperative, los líderes globales se enfrentan a dos tendencias sumamente preocupantes: Un declive en derechos personales, seguridad personal, y tolerancia e inclusión, y un avance lento y desigual a nivel global.
Si bien es cierto la situación de Costa Rica es alentadora, al compararse con los últimos 10 países que entraron a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el país apenas supera a 5 en el Índice de Progreso Social. Costa Rica tiene debilidades en acceso a la educación superior, así como a la información y comunicaciones; dos componentes claves para generar un país competitivo en innovación y tecnología.
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Asimismo, al interior del país, el reto está en disminuir las diferencias regionales entre los cantones costeros y fronterizos principalmente rurales que tienen un rezago en progreso social, crecimiento económico y competitividad respecto a los cantones centrales mayoritariamente urbanos.
“Si queremos mantener el liderazgo en progreso social, el país tiene que generar las innovaciones sociales del siglo XXI, aumentar la competitividad y la sostenibilidad, sobre todo en las costas y las fronteras para garantizar una Costa Rica próspera y sostenible en el 2030”, expresó, Roberto Artavia, presidente de INCAE Business School y vicepresidente de Social Progress Imperative.
¿Qué pasa en el resto de la región?
El Índice del 2017 revela que aunque el progreso social, que incluye medidas de oportunidad, salud, educación y la no discriminación, tiende a aumentar a medida que aumenta el PIB, el bienestar económico por sí sólo no explica los resultados del progreso social.
Ejemplo de ellos es Estados Unidos, que siendo el país más rico de los G7, debería haber logrado un avance más significativo en progreso social en los últimos cuatro años, pero bajo cualquier punto de vista, su progreso se ha paralizado. Su ligera mejoría en la tabla de clasificaciones y cambios a nivel de componentes no debería minimizar el hecho de que el país está considerablemente rezagado con respecto a países con un PIB per cápita similar, en la mitad de las mediciones del índice de Progreso Social.
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Para Michael Green, CEO del Social Progress Imperative, millones de personas están sufriendo una disminución vergonzosa de sus libertades, más violencia e injustica, una evidente discriminación y exclusión de las oportunidades más importantes de la vida. A pesar de tener acceso a una riqueza extrema y otras influencias, los Estados Unidos junto con otros países avanzados casi no han tenido progreso en los últimos cuatro años.
Por otra parte, Honduras y Guatemala se perfilaron como los países más rezagados de la región, mientras Chile, Costa Rica, Uruguay y Argentina entre las ciudades con Progreso Social alto. Siendo la seguridad personal y el acceso a la educación superior las principales causas del rezago en el istmo.